BAILES FOLCLÓRICOS CHILENOS
En Chile, las primeras manifestaciones relacionadas al baile se remontan a las practicadas por los pueblos originarios, entre los cuales la danza mapuche ocupa un lugar preponderante. La conquista y distintas colonizaciones generaron un mestizaje cuyos efectos culturales terminaron dejando aquellos bailes en un lugar marginal, privilegiando las manifestaciones eclécticas, entre las cuales el mayor paradigma lo constituye nuestro baile nacional, la cueca.
Fue así como las distintas zonas del país fueron identificándose con distintos bailes folclóricos en vista de sus propias historias y características. El norte, de notoria influencia altiplánica, caracterizado por sus fiestas religiosas entre las que La Tirana y sus correspondientes bailes chinos, diabladas y huaynos son emblemáticos, se distingue paulatinamente de la zona centro, y ésta a su vez del área sur. Así por ejemplo, cuando en la zona central, junto a la cueca, se manifestaban bailes como la refalosa y la sajuriana, hacia el sur se masificaban danzas como el pequén, el cielito, la seguidilla o el costillar. En esta última región, Chiloé se constituyó como la unidad cultural más definida. En ella bailes como la pericona, el pavo, el rin y otras de presencia en la zona centro-sur de Chile, definían un folclor nacional en constante dinámica y recreación.Conjuntamente a estos bailes tradicionales, ha habido un proceso permanente de folclorización, en la medida que numerosos géneros, en vista de su paulatina popularización, se han ido empapando de la identidad cultural de Chile. En forma simultánea, se han ido incorporando otros bailes que, por mera apropiación política del territorio, hoy forman parte del crisol cultural chileno. El caso emblemático al respecto es el de los bailes de Rapa Nui.
Todo esto ha consolidado un cuerpo de bailes folclóricos nacionales sumamente variado, de distinto origen y diferente sentido, pero todos parte de este fragmentado país. Gracias a la labor de importantes investigadores y recopiladores como: Margot Loyola, Gabriela Pizarro, Héctor Pavez, María Ester Grebe, Violeta Parra, Rolando Alarcón, y muchos más, esta variable de identidad cultural es conocida hoy, a pesar de que muchas de las danzas reconocidamente folclóricas, han perdido total o parcialmente su vigencia.
Cronologia de los Bailes folclóricos chilenos
1817
Según estudios basados en los escritos de José Zapiola, llegan a Chile con el ejército de San Martín, bailes como el cielito, la pericona, la sajuriana y el cuando.
1824
Se conoce la cueca en Chile.
1835
Según estudios llega a Chile, proveniente del Perú, la refalosa y otros bailes.
1840
La sajuriana es de gran popularidad en la zona central de Chile.
1884
Con el fin de la Guerra del Pacífico y la anexión para Chile se de las provincias de Tarapacá y Antofagasta, se incorporan al folclor nacional las tradiciones y expresiones típicas de esta cultura.
1946
Jorge Negrete visita Chile, dando un fuerte impulso a la popularidad de la música mejicana y su paulatina folclorización.
1950
La recopilación e investigación de Margot Loyola es plasmada en 1980 en su libro Bailes de tierra en Chile.
1952
Es invitada a la Fiesta de Nuestra Señora del Carmen de la Tirana, la Diablada Ferroviaria de Oruro.
1960
Se populariza el tamure en Rapa Nui.
1963
Se genera en Santiago la llamada "Guerra de las refalosas".
1970
El grupo Aparcoa graba el "Cielito, cielito", recopilación de Héctor Pavez.
1979
18 de septiembre. Por decreto N°23 se declara oficialmente a la cueca como baile nacional de Chile.
Libros para descargar
La Tirana Recuerdos de treinta años Fiesta de la Tirana
Historia de la Musica en Chile Bailes Chinos Coreografia Resfalosa
Coreografia Sajuriana Pequen o Apequena Coreografia Seguidilla
"Cassette sonoro"
Fuente: memoriachilena